"...yo no he venido aquí a calentar la silla, así que si me tengo que levantar e irme, me voy y ya está (que nunca está)... que yo estoy más a gusto en mi casa, a mi esto de las cámaras... y que te vean por la tele,... no me va para nada"
¬¬
Ding, dong, dan, dínnnnn... Última llamada para el
... y de su credibilidad, que para mí tiene la misma que un boniato intentando que invierta en bolsa en su ONG, "12 boniatos, 12 causas". Y ya cuando rematan con lo de: "es que me corto con las cámaras", venga, no te cortarías con una cámara ni aunque la afilaran todos los días; no te cortas ni con un cortapizzas a motor descontrolado por la encimera de la cocina.
Estamos hablando, por supuesto, de esos nuevos
Sí amigos, quieras que no, es menester comentar algunas hazañas de este tipo de personaje que hace tan especiales tus platos. Y, por qué no, cómo exterminarlos de una manera limpia y eficaz. (Recuerda siempre: si no hay rastro, no hubo crimen).
Primero os voy a dar varias razones para exterminar (qué me gusta esa palabra) a los susodichos: Están enturbiando el significado de televisión como medio de comunicación, de entretenimiento, de información, y como empresa (ya que emprender, emprende poco). Yo, como integrante en vida de algún Medio, puedo decir que si: otra programación es posible. En un tiempo, de hecho, hubo amagos de programación, entretenimiento familiar, y no soliloquios sobre quién llama más la atención.
La otra razón es algo más profundilla, de carácter introspectivo, ya que la gente suele pensar que si algo sale en la tele, es bueno (vease sobretodo productos de consumo), y que si algo sale en la tele puede ser cierto. La sociedad ya está bastante echaita a perder, pero no está de más entender que por tirarnos las horas viendo como los demás son patéticos, uno mismo no es menos patético... Algo así como un calmaconciencias. Y lo dejo en el aire, porque huele regular.
Programillas como MYHYV, o llamémoslo X, son una incógnita en cuanto a su veracidad. Ciertamente, uno piensa que nadie puede prestarse a que saquen a la luz intimidades y guarreridas propias de un gurumelo desbocao, y a que ensucien su imagen a lo tonto. ¡¿Cómo que nooo?! ¡¿Quién dijo miedo?! ...A ver, un momento porfavor (momento pinganillo)... vale, me comunican que, efectivamente, tenemos a un tonto que desea vender hasta su batamanta por salir en nuestro programa. Si... si... vale, me comunican que está profundamente enamorado de nuestra tronista invitada y que odia el mundo de la televisión. En estos momentos lo está pasando realmente mal, parece que algún extraño liquido cae de su ojo izquierdo... Si..., ok, me comunican que en estos instantes acaba de escribir algo en la puerta de la discoteca que no intenta promocionar de ninguna manera. Parece que está escribiendo: Yolanda, te quiero, pero estoy confuso, porque dentro, todo se magnifica. (Espacio patrocinado por Discoteca Towapo).
Todo por la fama: si eres famoso eres querido, u odiado, pero al menos, eres alguien, no pasas desapercibido. Y, como hacen muchos niños pequeños, llaman la atención de quien está por encima de la manera que se les ocurra, con el único fin de que le quieran y le tengan en cuenta.
Bien, estais esperando a que desvele cómo exterminarlos, ya que tenemos claro que:
"Verdad que no nos gusta esoo??? Noooo! Verdad que deseamos que se mueraaaan? Siiiii."
No malinterpretéis, malditos concubinos de Satán, esa frase la he cogido de la película de los Addams, ¿cómo voy a querer yo nada malo para ellos? Si en realidad ellos me la #hdf!aghjf&$hgkgh* gfsh!
El CÓMO: Cambiando de canal. Al principio cuesta, pero luego es como el perdonar, no sabes por qué, pero te sientes mejor.